Una de las bodegas familiares más prestigiosas de la Ribera del Duero, las Bodegas Rodero Villa. Ahí se ubican los viñedos del Pago de los Capellanes, que trabajan un 100% de la variedad Tinto Fino o tempranillo, la uva autóctona de la Ribera. Aunque inicialmente apenas había unas pocas cepas seleccionadas, año tras año han ido ido multiplicando los mejores clones. Su gama de cinco vinos elaborados con tempranillo destacan por su estructura y elegancia. En nariz muestran su potencial de fruta. Persistentes en boca, su paso es muy agradable y aterciopelado, lleno de matices. Vinos con alma, vinos que hablan.

La conservación de ocho nogales centenarios situados en las viñas fue el punto de partida que determinó el emplazamiento de la bodega. Desde el principio se optó por un esquema que realzara esta preexistencia en forma de patio alrededor del que se desarrollarán las diversas funciones. La totalidad de la bodega se integra en el paisaje natural que lo envuelve a través de un continuo y fluido manto de hiedra, enriquecido con la majestuosidad de los nogales centenarios.