Tras realizar la cartografía de las 7 ha del valle de La Mata en el 2002, en el término de Atauta, encontramos y clasificamos trece suelos distintos. Observamos también dentro de ellos una mancha de subsuelo arcillosa de color marrón sobre la cual cultivamos 0,2 hectáreas. La presencia de la arcilla aseguraría la regulación hídrica de la planta a lo largo del año.
El catastro de 1904 ya recogía la existencia del viñedo viejo en esta zona del valle, en su mayor parte de Tinto Fino y un 2% de Albillo.
El viñedo se encuentra con una exposición este, recibiendo el sol de la mañana y del mediodía. Por la tarde, la sombra de la ladera oeste crea un microclima fresco, propio del ‘terroir’, que firma la singularidad al ‘grand cru’ de La Mata.
El viñedo viejo transmite consistencia, regularidad al vino, mientras el microclima aporta sutileza aromática, teniendo como resultado final un paso por boca sedoso y sensual.
Tras realizar la cartografía de las 7 ha del valle de La Mata en el 2002, en el término de Atauta, encontramos y clasificamos trece suelos distintos. Observamos también dentro de ellos una mancha de subsuelo arcillosa de color marrón sobre la cual cultivamos 0,2 hectáreas. La presencia de la arcilla aseguraría la regulación hídrica de la planta a lo largo del año.
El catastro de 1904 ya recogía la existencia del viñedo viejo en esta zona del valle, en su mayor parte de Tinto Fino y un 2% de Albillo.
El viñedo se encuentra con una exposición este, recibiendo el sol de la mañana y del mediodía. Por la tarde, la sombra de la ladera oeste crea un microclima fresco, propio del ‘terroir’, que firma la singularidad al ‘grand cru’ de La Mata.
El viñedo viejo transmite consistencia, regularidad al vino, mientras el microclima aporta sutileza aromática, teniendo como resultado final un paso por boca sedoso y sensual.
“Nos identificamos con las bodegas que comercializamos.
Somos parte de ellas”.
Lunes a Viernes: de 9.00 a 17.00 h.
Email:
(+34 ) 96 150 01 46
(+34) 647 156 519